viernes, 11 de julio de 2014

NO ES LA LEY DEL TALIÓN

Cuando en el pueblo judío la venganza era ley, Moisés intervino con la ley del Talión: "Ojo por ojo y diente por diente". Era un avance. Se instauraba, por ley, que nadie podía hacer a otra persona más daño del recibido. No es que con ello se solucionasen todos los problemas. Tampoco se cumplía en todos los casos, pero se iniciaba una etapa diferente. Cuando Jesús habla del perdón, de poner la otra mejilla y de amar al enemigo, el ideal queda muy alto. Y eso tampoco significa que se cumple entre las comunidades cristianas, pero ahí está. Lo que está pasando con Israel y Palestina nos retrotrae a los tiempos anteriores a Moisés. Deberían ser las corrientes ultraortodoxas las que deberían interpretar la Torá judía al menos de acuerdo con la ley de Moisés, pero son quienes más empujan a la venganza: cien muertos por uno, mil liberados por uno, un millón de sufrimiento por uno. Y la autodenominada comunidad internacional como el avestruz, con la cabeza debajo del ala, o debajo del dólar.

domingo, 15 de junio de 2014

BOMBEAR LUZ

El olor a sangre en los vientos de la guerra se filtra por la televisión. Centroáfica, Nigeria, Libia, Egipto, Afganistán, Irak, Ucrania... y cien silencios que no llegan ni al filtro. La savia de la utopía sigue irradiando las venas del los nacederos del mundo en almas generosas que no consienten la mentira. También aquí, con otras palabras, está la guerra del paro, de la desnutrición, de la ausencia de cultura, de las injusticias. No hay choque de tendencias, sólo hay caminos diferentes donde la luz y la oscuridad nunca dormitan. Cada cual elige la coagulación de la sangre dolora o el esfuerzo por bombear luz hasta la médula.

lunes, 17 de febrero de 2014

LA PERSONA HA MUERTO

Llevábamos un siglo preguntándonos por la muerte de Dios. Esa gran pregunta ha tenido respuestas pequeñas y, de tanto preguntar, ha dejado de ser una cuestión relevante. Aunque, claro, muchos pensamos que el dios que ha muerto es el dios que vigila, que controla, que quita la libertad, que justifica el hacer daño al enemigo, mientras el Dios vivo, resucitado, es el misericordioso, que perdona siempre. De todas formas, a muchas personas les da lo mismo. Y, lo que es peor, también les da lo mismo la muerte de la persona. Porque no es vida aquella que es ajena al sufrimiento ajeno, aquella que justifica todo daño, directo o colateral, aquella que es indiferente a todo cuanto nos rodea, a excepción del propio ombligo. Si somos seres sociales, y en la medida en que nos relacionamos con otras personas vivimos la auténtica humanidad, cuando rompemos la relación positiva vivimos la muerte. La persona ha muerto. Fin de la historia.

miércoles, 22 de enero de 2014

¿MIEDO?

Resulta que todavía no se me ha quitado el miedo de encima. Ha sucedido cerca de la parada del autobús, casi delante de la iglesia. Un joven iba detrás de una joven. El gritaba, ella marchaba hacia adelante intentando zafarse de él. En algún momento le ha dado un empujón, y un golpe en la espalda. Me he quedado parado, delante de la escena, mirando fijamente. El joven, por no utilizar otro término para denominarlo, se ha dado cuenta de mi actitud y se ha detenido. Se me ha enfrentado, me ha dicho unas cuantas palabras que no vienen al caso, y se ha dirigido hacia mí, expresando toda su agresividad. No he mantenido mi actitud de mantenerme quieto, me he dado la vuelta porque no quería recibir ningún golpe y he movido las piernas, no de una manera vergonzosa…, bueno habría que verlo. Cuando he mirado hacia atrás he comprobado que ya no estaban, ni él, ni la joven. Al cabo de poco tiempo ha llegado un coche de la policía municipal pues alguna persona más también se había fijado en la escena y ha sido responsable. Como no tengo todos los datos desconozco el desenlace de esta historia, de momento; pero sí sé que ese miedo que yo he llevado dentro, durante un tiempo, tiene que verse acrecentado en la joven desde hace tiempo y cualquiera sabe hasta cuándo. Terror lo llaman.

lunes, 6 de enero de 2014

¿COMENZAR?

Es signiticativo que tengamos necesidad de comenzar algo, y si mantiene relación con un calendario existe menos pudor para afirmarlo. En realidad no comenzamos nada, aunque, eso sí, reiniciamos ciclos que pueden tener, afortunadamente, características diferentes. Toda la naturaleza, tanto los seres vivos como la materia inanimada, tiene sus ciclos, aunque su calendario no sea el mismo, lo cual no significa que todo se repite, pues la historia tiene un sentido lineal, al menos según algunos puntos de vista que comparto. Somos partículas diminutas de un todo en cambio, y somos protagonistas de grandes historias personales y colectivas que se encuentran en nuestras manos. Los dos o tres enfoque son compatibles. Y en la medida en que sepamos caminar con nuestros pies y dar nuestros propios pasos, la dirección de nuestro destino, a pesar del viento, o gracias a su aliento, se va marcando. Nada sucede porque sí, nada es definitivo, nadie tiene la verdad, pero hay millones de personas que la buscan a trocitos, y en esa búsqueda está la solución.

martes, 10 de diciembre de 2013

LA ALEGRÍA DE LA MUERTE

Si hay algo que me llama la atención en los funerales de Nelson Mandela es la alegría del pueblo. Es como una manifestación festiva que canta y baila en torno a la muerte. Efectivamente, la muerte nos recuerda los aspectos positivos de la vida y, además, cuando nos despide de ella, nos recuerda que no sólo es un mecanismo de defensa de la especie, sino que es un mecanismo de defensa ante el sufrimiento. Excepto cuando morimos de forma violenta, a causa del cainismo humano, o a causa de la complejidad de la naturaleza en un planeta en movimiento, la muerte nos libera de la vejez extrema, del sufrimiento, de la enfermedad. Cuando alargamos excesivamente la vida contribuimos a hacer durar el sufrimiento. Quienes han sufrido mucho cantan y bailan ante la muerte, y no es que sea un valle de lágrimas como castigo divino, sino que se agradece el don de la vida y la ayuda para entrar en otra vida sin sufrimiento. Aquí, claro, entra la compleja respuesta del mundo religioso. También en el funeral de Mandela ha estado presente la religión en una celebración multirreligiosa. Y es que la religión nace de la muerte y sirve a la vida en la medida en que la alegra, le da libertad y es tolerante. Se ve funeral en el rostro de los cien jefes de estado y otras representaciones del mundo mundial, pero en la gente de Sudáfrica se ve fiesta en la mirada ante la muerte de Mandela.

domingo, 20 de octubre de 2013

FRAGILIDAD

Somos personas limitadas que, aunque busquemos el infinito, tenemos un hermoso, pero limitado, horizonte incluso en la mirada, que es la más libre de nuestras libertades. Y cuando los ojos van perdiendo ya específica capacidad, tenemos la posibilidad de mirar hacia adentro, como si el agua de nuestro pozo siguiese siendo transparente, pero también hay alteraciones y aguas turbulentas. Cualquier enfermedad, por mínima que sea, nos perturba. Cualquier desamor, una mirada desviada, nos inquieta, pero el secreto está en mantener firme la mirada, aunque cada vez veamos menos, porque es la mirada al horizonte infinito la que nos sostiene el alma.