jueves, 10 de marzo de 2011

DEMASIADO RUIDO

Es curioso cómo se transmite la información en nuestra sociedad. Internet comienza a suponer un ideal de retroalimentación con el que soñábamos hace varias décadas, cuando criticábamos que la concentración de los medios en unas pocas manos que controlaban el dinero suponía una merma al derecho a la información. No es que las cosas estén solucionadas, ni mucho menos. Ya se habilitarán fórmulas para controlar el flujo de ida y vuelta constante de internet. Tampoco Internet es el único medio de información libre. Las redes sociales no están presentes solamente en el mundo virtual, pues el boca a boca y otros elementos simbólicos siguen actuando constantemente. Aún así, o precisamente por eso, hay demasiado ruído. La información es un camino hacia el ruído y para que se oiga o se entienda algo tiene que haber alguna diferencia entre lo que se conoce y lo que se informa, pero si son demasiados los datos se produce un ruído que distorsiona la comunicación. Estamos recibiendo tanto ruído que no nos enteramos de lo que en realidad sucede en el Norte de África, en el África subsahariana, en China, en Palestina, en Europa, en el continente americano y en el resto que nos falta por citar. Hacen falta pocos datos, pero fundamentales, para conocer nuestro mundo. ¿Quién le pone el cascabel al gato? Fuenteovejuna, todos a una. Y sin tirar la toalla porque los procesos siguen.

1 comentario:

Unknown dijo...

Muy interesante "el resto que nos queda por citar", las guerras olvidadas como la de Somalia, allí no hay petróleo, no hay intereses,... solo el de las armas que vendemos a unos y otros para que se diezmen. Al servicio de quiénes están los medios de comunicación?