LA MEMORIA

Somos lo que recordamos, dice García Marquez. No somos lo que tenemos, aunque hay quien lo cree así, o al menos así mira a las personas, sólo con los ojos exteriores, sólo con el metro de medir números y con la calculadora de contar dinero. Pero los sentimientos, las imágenes de felicidad, los desencuentros... están ahí en la retina y configuran nuestro ser actual. En la medida en que sabemos superar las sombras pasadas sabemos andar por el camino de la luz que nutre la esperanza. Eso no quiere decir que es justo y necesario el olvido. Se trata de llevar las sombras, debajo del brazo, como un fósil muerto que nos ayuda a recordar el pasado, pero sin que nos pese para seguir caminando. Somos lo que queremos ser y no estamos dispuestos a renunciar a ello.